Diario de un Peregrino Etapa 13 Sto.Domingo de la Calzada - Belorado

Y así ha sido después de una noche algo diferente a la anterior (las camas crujían, sonaban alarmas varias de móviles, una orquesta de ronquidos y el “gracioso despertar” del cillero, tocando una campana y ataviado con una nariz de payaso); a las 8  todos ya desayunando, y después de improvisar nuevo cartel en la pancarta, foto en la plaza de España.

Con un pronóstico de lluvias para todo el día, nos ponemos en marcha, dando paso a la etapa número 13, hacia Belorado, nuestro destino a 21km.

A los 5km. llegamos a Grañón y viendo la iglesia abierta entramos a visitarla, 4 km. más y llegamos a Redecilla del Camino (antes de llegar encontramos el limite de La Rioja y Castilla- León, y aquí es donde Ana se vuelve loca al ver que con esto consigue su primera cinta). 9 kilómentros más y seguimos mirando al cielo (si no con miedo, siíprecaución) aire, frío y amenazando lluvia llegamos a Castildelgado.

Pasando el pueblo sucede lo que ya esperábamos, empieza a llover y con paso ligero llegamos a Viloria de Rioja (Cuna de Santo Domingo de la Calzada) y donde, dando gracias  al apóstol, nuestros chicos han encontrado refugio para poder parar y almorzar a espaldas de la iglesia, cobijo que resulta bastante acogedor.

Una vez hubimos almorzado y no queriendo que se enfriaran los músculos, recogidas las perneras y bien tapadas con los chubasqueros, las jorobadicas emprenden el camino mano a mano, y pasando por Villamayor del río echamos el resto en los últimos 5 km que, aunque no mucho, la mezcla de aire, frío y agua, hace que se nos este haciendo largo.

Llegados a Belorado y sellando nuestras credenciales en la oficina de turismo (atendidos por una simpática muchacha) preparamos la comida, hacemos la entrega de las cintas conseguidas por algunos de los mamuts, pasando bajo los bastones y paraguas, tomamos un cafecito, hacemos recorrido por las calles siguiendo los curiosos cuadros de pies y manos de gente famosa del mundo del periodismo, deporte, escritores, políticos…..(que marcan el camino a seguir en lugar de las típicas conchas) y de ahí a los coches y bajo una lluvia constante por la carretera llegamos a Zaragoza todos sanos y salvos.

Y hasta la próxima……